15 may 2008

Voces del Pueblo - Comunicacion Participativa

Eric Peralta*
El neoliberalismo como contexto socio histórico

El 24 de marzo de 1976 la junta militar generaba las condiciones necesarias para instaurar en nuestro país un nuevo modelo económico. La premisa para la aplicación del neoliberalismo suponía la exterminación de las organizaciones surgidas del pueblo.
Desarticuladas estas experiencias de poder popular avanzaron, en el marco de una democracia formal y vacía de contenido, en la extranjerización de nuestros recursos estratégicos, en la supresión del rol del estado, en la desprotección de los trabajadores, y en una rápida y constante concentración de las riquezas de unos pocos a costa de las mayorías empobrecidas.
Fueron precisamente los trabajadores y el pueblo quienes desde las necesidades diarias generaron espacios de participación, a través de organizaciones populares que en todo momento resistieron la aplicación de cada una de las políticas llevadas adelante por los impulsores del modelo neoliberal, generando en diciembre del 2001 el "Argentinazo".
En toda esa etapa de resistencia diversas organizaciones de nuestro país, como movimientos sociales, organismos de derechos humanos, espacios de la cultura y la comunicación fueron desarrollando, desde sus experiencias cotidianas, nuevas formas de hacer y decir la política en la construcción de otra Argentina.
La universidad no fue ajena a esas expresiones de resistencia, el rechazo que buena parte de los estudiantes expreso contra la aprobación de la Ley de Educación Superior, ha tenido en los años 90 importantes movilizaciones.
Fue en el calor de estas luchas que comenzó a darse nuevamente en las facultades el viejo debate sobre la participación de los futuros profesionales e intelectuales en la organización y la lucha de nuestro pueblo, debate que finalmente resolvimos "metiendo los pies en el barro", reafirmándonos en la praxis de los estudiantes en los barrios junto al pueblo.
Por aquellos días en un documento fundacional recuerdo haber expresado un deseo: "Como bálsamo del aventurero mercado, el neoliberalismo capitanea un prolongado viaje en el que se pronostican probables precipitaciones e inevitables tormentas", hoy sabemos que los sostenedores del modelo, los ideólogos del "fin de la historia" se desesperan por regenerar el consenso social perdido frente a las tormentas de rebeldía expresadas por diversos actores del campo popular.
Los grandes medios en la vereda de enfrente
"Nos mean y los medios dicen que llueve", decía un graffiti pintado en los vidrios de la ATC de Gerardo Sofovich. La imposición del neoliberalismo no habría sido posible sin la anulación del derecho a la información sostenida por los medios públicos o privados, el proceso de concentración y extranjerización de los medios de comunicación, instalo la lógica de maximización de la renta por sobre los derechos comunicacionales de los ciudadanos. En esa realidad, el Estado se encuentra trabado para iniciar un proceso de discusión en torno a la definición de un sistema de medios acorde a las necesidades de la sociedad y no a los vaivenes empresariales. Definir las funciones del sistema público, garantizar la pluralidad y diversidad de opiniones que garantice la variedad democrática, siguen siendo parte de los desafíos pendientes.
Las privatizaciones en el sector local de las comunicaciones han permitido, en el marco de los procesos de concentración y transnacionalización, la instalación de significantes útiles a los intereses de los sectores dominantes. Una de las formas más claras de incidencia que tienen los grandes medios es hacer visible o invisible algunos temas: lo que algunos llaman la "visibilidad" de ciertos acontecimientos, decidiendo qué es de interés público y qué no. Y entonces hay temas que aparecen en la agenda pública y otros que desaparecen como el proceso de resistencia antes mencionado.
Medios comunitarios, visibilizar lo invisible
Para los medios comunitarios fueron años de experiencia y compromiso en todo el continente, la mayoría de ellos sostenidos desde un trabajo voluntario. De esa experiencia se puede recuperar un capital ético construido, cuyo eje central fue el compromiso con los sectores oprimidos y necesitados buscando su desarrollo social y político. Mientras los grandes medios alababan las bonanzas de la globalización neoliberal los medios comunitarios reflejaban la resistencia a sus consecuencias, aprendiendo junto al pueblo que la comunicación es una cuestión de sujetos en relación, poniendo el énfasis en la existencia de sujetos de la comunicación que debían producir relaciones entre sí: los miembros de una población o de una comunidad determinada, de un sector social, y los comunicadores siendo parte de ese universo.
Como lo plantea Rosa María Alfaro Moreno, en "la ruta de las redefiniciones", "no sólo se logró señalar su importancia en el proceso comunicativo sino que se pudo ver en ellos sus problemas y conflictos, el lado inconforme, la debilidad de los sujetos como víctimas de un orden social injusto. Y a pesar de concepciones simplistas en el nivel cultural se consiguió destacar que eran sujetos culturales más o menos complejos y no sólo revolucionarios políticos. Frente a comprensiones más estructurales de la sociedad, esta comunicación puso el lado humano aunque también político desde sus prácticas, reivindicando inclusive los aspectos recreativos del que hacer comunicacional y el contacto entre la gente, tanto desde los medios como en la relación directa".
En todo momento se resaltó de manera práctica que las grandes mayorías podían y debían hablar, justamente porque el dialogo construido lo sustentaba así. El compromiso de informar a favor de los pobres genero de alguna manera un enlace con la democracia.
La radio fue el medio que mejor permitió explorar esta perspectiva. Experiencia que además comprometió a todo el continente, no sólo usando radios pequeñas de corto alcance sino otras de gran potencia coincidiendo desde la práctica con la imagen de las mil voces.
Una experiencia de comunicación popular
¿Cuál es el medio de informar al pueblo? En el lanzamiento del periódico Liberación, Jean Paul Sartre afirmaba: "El medio es el pueblo mismo. Les han hablado de objetividad. La objetividad es una situación verdadera tal como la expresa el pensamiento popular. Es gente que piensa sobre una situación que es la suya. Eso es lo que tenemos que recoger. Tal como se lo han dicho, el periodista no debe hacer la historia, no debe interpretarla. Tiene que recoger el acontecer y entregarlo a la gente del pueblo. Hace falta pues, esencialmente, que el pueblo discuta con el pueblo"
Desde el Colectivo de la Azotea, experiencia comunitaria de la ciudad de Mar del Plata, venimos construyendo otra comunicación donde las prácticas periodísticas como la producción de la información están atravesadas por la comunidad. En el trabajo llevado adelante junto a movimientos sociales, organismos de derechos humanos y espacios de la cultura nos encontramos generando una "agenda participativa", es decir, que promueva la deliberación y la acción pública.
En la terquedad de visibilizar lo invisible hemos centrado nuestra construcción en el desarrollo de un conocimiento autónomo, crítico, popular y solidario, entendiendo los procesos comunicacionales como lo que son, procesos de constitución de la misma sociedad y la subjetividad, es decir, procesos en los que se construye el mundo humano.
Es a través de esta premisa que llevamos adelante capacitaciones de comunicación abiertas a la comunidad, conformando Redes de Corresponsales Barriales, producciones radiales y gráficas de las organizaciones, haciendo la radio junto a los que construyen, desde la participación popular, nuevas formas de hacer la política.
Creemos que la democracia representativa ha llegado a un límite como modelo de gobierno en los países de América Latina, limitación que prueban las crisis políticas que viven casi todos nuestros países desde mediados de los ’90, con el descrédito de los dirigentes y la exclusión de la mayor parte de la población de sus necesidades básicas como de las decisiones fundamentales.
La colombiana Ana Maria Miralles, quien ideo el concepto de "periodismo público" nos plantea que para profundizar la democracia, para avanzar hacia la participación protagónica, primero se necesita construir "opinión pública": es decir, en palabras de la propia Miralles, "potenciar la capacidad deliberativa de los ciudadanos".
Los medios comunitarios entonces, que se involucran junto al anhelo de bienestar de sus pueblos porque comparten sus intereses, no pueden más que anhelar dos objetivos prioritarios: por un lado, la construcción de sus productos con una ética, estética y pedagogía comunitarias (que deberán ser definidas por consensos que respeten la diversidad de cada comunidad), y por otro lado, el tejido de redes sociales hacia la construcción de sociedades verdaderamente democráticas.
Éste último punto hace necesaria una aclaración. La construcción de redes sociales, en el marco de los intereses compartidos por la comunicación comunitaria y su medio, no debe hacer pensar en la posibilidad estanca de la eterna convivencia entre lo alternativo (vinculado a radios chicas y con dificultades), y los multimedios con recursos casi infinitos para su desarrollo e inserción social, sino justamente, redes para la transformación social, para exigir y trabajar en función de la democratización de los medios, en ese sentido es indispensable una nueva Ley de Radiodifusión de la democracia que reemplace a la ley de la dictadura aún vigente (22.285). "Si unos pocos controlan la información no es posible la democracia".

* Comunicador social, coordinador regional del ISEPCI (Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana) e integrante del Colectivo de Comunicación De la Azotea.

Referencias bibliográficas:
Daniel Antonio Hernández López 2001 De la comunicación massmediática comercial a la comunicación como esencialidad humana. Antecedentes y perspectivas de la comunicación en América Latina. / Instituto de Investigaciones de la Comunicación – ININCO
VIVE – Televisora Venezolana 2005 Manual de análisis del lenguaje periodístico

Glenn Postolski, Ana Santucho, Daniel Rodríguez 2006 Los medios de comunicación en el centro de la crisis / Observatorio de Medios – Área de investigación UTPBA

Martín Pique 2006 ¿De qué hablamos cuando hablamos de periodismo público? / Instituto de investigación social, económica y política ciudadana – I.S.E.P.C.I.

Rosa María Alfaro Moreno Culturas populares y comunicación participativa: en la ruta de las redefiniciones / Número 18 Revista Razón y palabra - CALANDRIA

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